Conocido como la "Excelencia de la ejecución", Bret Hart es uno de los luchadores más técnicos de la historia. Este especialista en maniobras de sumisión era conocido por minar sistemáticamente a sus rivales hasta que estuvieran listos para ser bloqueados con el Sharpshooter, un movimiento del que pocos escaparon.
Hart fue también un innovador en el ring, ejecutando diferentes estrategias y aplicando movimientos nunca vistos anteriormente, con lo que desafió a sus rivales e hizo crecer las expectativas de sus seguidores. Hart también tenía un instinto especial para sacarse de la manga pinfalls cuando sus rivales parecían tener todo a su favor para ganar los combates. "Hit Man" se entrenó junto a sus hermanos y otros aspirantes a luchadores en Calgary, en la famosa Mazmorra de Stu Hart. Fue allí donde su padre hizo hincapié en que aprendiera la técnica y el talento, y fue allí donde Bret aprendió a dominar un arsenal de maniobras que después ha aplicado a cuantos se han cruzado en su camino.
Bret Hart salió de la Academia Stampede de Calgary camino de la WWE como un especialista en equipos junto a Jim "The Anvil" Neidhart. El tamaño de Neidhart y su enorme fuerza casaron perfectamente con la habilidad y el saber hacer de Bret. Juntos fundaron la Fundación Hart, un dúo que marcó una época en los años 80.
La Fundación Hart consiguió su oportunidad en el Campeonato Mundial por equipos frente a la popular y arraigada pareja llamada los British Bulldogs. Fue el 26 de enero de 1987 y ese día, Bret y su socio conmocionaron al mundo de la lucha libre, al ganar el campeonato con un movimiento único que más tarde sería conocido como el "Hart Attack". La pareja envió el mensaje de que a pesar de llevar poco tiempo en el circuito, Hart tenía una calidad impresionante y una voluntad de ganar inigualable.
La Fundación Hart iba a tener muchas peleas memorables contra parejas históricas como los Nasty Boys, Demolition y la Strike Force. Después de cuatro años de competición y dos largos reinados como Campeones Mundiales por equipos, Hart continuó su ascenso en la WWE. Como una superestrella individual, Hart derrotó a Mr. Perfect por el Campeonato Intercontinental en agosto de 1991 en una gran batalla. Hart parecía estar bien encaminado hacia un largo reinado, pero su arrogante confianza en sí mismo le costó el Campeonato Intercontinental contra The Mountie a principios de 1992.
En contra del consejo de sus ayudantes, Hart insistió en defender el Campeonato Intercontinental en un evento en directo en Springfield, Massachusetts, a pesar de una fiebre altísima que podría haberle tenido hospitalizado. Bret no quería decepcionar a los aficionados allí presentes y no quiso dar marcha atrás. Sin embargo, no estaba en condiciones de luchar y perdió esa noche. Pero en cierto modo, gracias a este caso se pone en marcha uno de los combates más memorables de la historia de Hart, la noche en que volvió a ganar el Campeonato Intercontinental, derrotando a su viejo amigo Rowdy Roddy Piper.
La noche en la que Hart perdió el Campeonato Intercontinental por segunda y última vez, también debe ser considerado un punto culminante en su carrera por derecho propio. En un asunto de familia cargada de emociones, Hart se midió a su cuñado, Davey Boy Smith ante más de 80.000 aficionados en el estadio de Wembley en Londres. Después de un combate que se fue más allá de los 25 minutos y que será históricamente recordado, Hart y Smith se dieron la mano y ambos celebraron su éxito en el centro del ring, junto con Diana, la hermana de Bret y esposa de Davey.
En marcado contraste con la majestuosidad y la fanfarria de ese combate en el estadio de Wembley, Hart logró el que sin duda ha sido su mayor hito en la WWE en una relativa oscuridad, en octubre de 1992. En un evento en directo y no televisado, celebrado en Canadá, Hart obligó al legendario campeón del mundo de Ric Flair a rendirse con el Sharpshooter. Fue el primero de los cinco Campeonatos de la WWE para el hombre que con mucha valentía declaraba con frecuencia: "Yo soy el mejor que hay, el mejor que ha habido y el mejor que nunca habrá".
Después de volverse enemigo de luchadores de la talla del ex campeón Flair, Razor Ramon y Shawn Michaels, Hart se enfrentó a su mayor desafío en WrestleMania IX, midiéndose al gigante Yokozuna. Cuando Hart había atrapado a Yokozuna con el Sharpshooter, Mr. Fuji saltó al ring y echó sal en los ojos de Hart, permitiendo a Yokozuna vencer a Bret y conquistar el Campeonato de la WWE. Sin embargo, Bret se recuperaría, ganando un torneo de una sola noche para convertirse en el primer Rey del Ring (King of the Ring) de la WWE en junio de 1993, comenzando una rivalidad con Jerry Lawler sobre quién era el verdadero rey de la lucha libre.
En 1994, Hart ganó el Royal Rumble y luego ganó dos peleas en una noche en WrestleMania X para capturar el Campeonato de la WWE por segunda vez. Ese último combate de WrestleMania sirvió también para que Hart se tomara la venganza contra el hombre que le engañó un año antes, el gigante Yokozuna.
Ese reinado duraría hasta que Bret Hart se midió a Bob Backlund en un combate en las Survivor Series de 1994. Hart nunca se rindió, pero aun así perdió el campeonato a causa de las sucias tácticas de su envidioso hermano Owen. En un momento de la pelea en el que Backlund estaba superando a Hart, Owen rogó a su madre Helen, que estaba sentada en la primera fila del ring, a tirar la toalla ‘por el bien’ de Bret. Su padre, el legendario Stu Hart, trató de detener a Helen, pero ella agarró una toalla blanca y la arrojó al ring, dando por terminado oficialmente el combate y regalando a Backlund el Campeonato. Fue el primer título de la WWE para Backlund en casi 11 años, pero iba a durar sólo tres días antes de que Kevin Nash se lo arrebatara con un Jackknife Powerbomb.
El tercer Campeonato del Mundo de Hart lo lograría ante un ex guardaespaldas, Shawn Michaels. Después de perder el Campeonato de la WWE contra el propio Shawn Michaels en WrestleMania XII, en el combate de 60 minutos Iron Man Match, Bret desapareció durante unos meses. En su ausencia, Stone Cold Steve Austin comenzó a retar a Bret en cada oportunidad que tenía, desafiándole a regresar al ring. Finalmente, a finales de otoño, Bret volvió a la WWE, anunciando que se enfrentaría a Stone Cold en las Survivor Series de 1996. Bret iba a ganar ese combate, pero la amenaza de Stone Cold no acabaría ahí.
Ambos decidieron finalmente resolver sus diferencias en un Submission Match en WrestleMania 13, en Chicago. Después de una agotadora pelea de 30 minutos, Bret redujo con el Sharpshooter a un ensangrentado Austin, en uno de los momentos visuales más famosos de la historia de la WWE. Austin nunca se rindió, pero el árbitro especial Ken Shamrock detuvo el combate y dio la victoria a Bret después de que Austin casi se desmayara por el dolor y la pérdida excesiva de sangre. Bret continuó su ataque después de la campana, provocando que los fans se volvieran en su contra.
La rivalidad entre ambos aumentó a partir de ahí, y Hart se dedicó a reclutar a un ejército para enfrentarse al propio Austin: a su ex compañero de equipo Neidhart, a su hermano Owen, a su cuñado miembro de los British Bulldogs y al propio ex compañero de Austin, Brian Pillman, reformando la Fundación Hart. Después de meses de lidiar con Austin, Hart centró su foco de atención en el campeonato del mundo que había ganado con anterioridad en cuatro ocasiones. Durante esa rivalidad, Stone Cold provocó que Bret perdiera su cuarto Campeonato de la WWE cuando Austin ayudó a Sycho Sid a derrotar a Bret por el campeonato que "Hit Man" había ganado sólo una noche antes.
El quinto reinado de Hart llegó de nuevo midiéndose a otro gigante del ring: más alto y más grande que nadie: Undertaker. Fue en agosto de 1997, en SummerSlam, cuando El Enterrador defendió su Campeonato de la WWE contra Bret Hart con Shawn Michaels como árbitro invitado. La estipulación previa al combate obligaba a Michaels a contar hasta la mitad. Pero en medio de la pelea, Hart comenzó un enfrentamiento muy duro con Michaels sobre la velocidad de su cuenta, llegando incluso a escupir a HBK.
Michaels cogió una silla y se la lanzó a Hart, pero sin darse cuenta golpeó al Enterrador. Michaels no tuvo más remedio que contar el pinfall y dio la victoria a "Hit Man". Fue el precedente de uno de los casos más polémicos en la historia de la WWE, cuando Bret se encontró con "The Showstopper" en las Survivor Series.
Ahora es conocida como la “Traición de Montreal." Cuando Mr. McMahon y sus colaboradores Gerald Brisco y Pat Patterson en primera fila, Bret Hart lanzó un feroz ataque contra Shawn Michaels. Después de muchas idas y venidas, Michaels optó sorprendentemente por utilizar un movimiento propio de Hart, bloqueando a Bret con el Sharpshooter.
Inmediatamente después de que Michaels ejecutara el movimiento, el árbitro Earl Hebner hizo sonar la campana y Shawn Michaels se adjudicó el Campeonato de la WWE. La confusión envolvió el pabellón y Hart se puso furioso ya que el nunca llegó a rendirse. No obstante, la decisión estaba tomada. Michaels comenzó su tercer reinado como Campeón de la WWE y la "era de la actitud" en la WWE se inició oficialmente.
Hart abandonó la competición disgustado y se fue a la WCW poco después, donde aún habría de acumular más elogios y títulos. Durante su estancia en la WCW entre 1997 y 2001, Hart se convertiría en Campeón por equipos de la WCW, cuatro veces Campeón de los Estados Unidos y dos veces Campeón de la WCW, derrotando a Goldberg por el título final.
En 2010, comenzó una nueva década en la WWE con el regreso tan esperado de la “Excelencia de la ejecución”. Hit Man hizo historia en su primera aparición en la WWE desde La Traición de Montreal 12 años antes. Su primera noche la pasó como invitado especial de Raw y en vez de pasarla tranquilo, reavivó una enorme e inestable rivalidad personal con el presidente de la WWE Vince McMahon. Esto culminó con el retorno a la acción de Hart en WrestleMania XXVI, donde Bret, flanqueado por varios miembros de su familia, obligó a su mayor enemigo a rendirse ante el Sharpshooter.
Incluso después de lograr lo que meses antes parecía sería un objetivo inalcanzable en la WWE, el hombre vestido de rosa y negro se hizo una vez más con un título brillante que añadir al de miembro del Salón de la Fama WWE: su quinto Campeonato de Estados Unidos. Casi una década después de saborear su último campeonato, el triunfo de Hart da relieve a esa famosa declaración realizada tantos años antes. Bret Hart reafirmó por qué es realmente el mejor "que ha habido y que nunca habrá".
